Los francotiradores de élite del ejército inglés están recibiendo un entrenamiento exprés en seguridad nacional por parte de efectivos del SAS en medio de temores a que ellos y sus familias se conviertan en el blanco de los terroristas islámicos después de una serie de errores del Ministerio de Defensa.

Personal del Ministerio publicaron online hace poco informes oficiales con nombres y fotografías de los francotiradores, algo que consideran que puede poner en peligro sus vidas y las de su gente cercana.

Al menos 50 soldados, entre ellos los pertenecientes a unidades del Regimiento de Paracaidistas y Royal Marine de élite, y algunos de los que han abandonado el Ejército, han asistido a entrenamientos para aumentar su seguridad a raiz del incidente.

En estas lecciones que están teniendo lugar en la sede del SAS en Hereford, se enseña a los francotiradores cómo escapar y evadir la captura si los yihadistas decidiesen atentar contra sus hogares o en su día a día. También se les advierte de no llevar identificaciones militares, retirar sus nombres de la lista electoral e informar sobre actividades sospechosas a la policía.

Los cursos incluyen sesiones informativas sobre la seguridad cibernética, les están mostrando cómo frustrar los intentos de hackear sus teléfonos móviles, correo electrónico y páginas de Facebook.

Las medidas extraordinarias tuvieron que ser puestas en marcha después de que el Ministerio de Defensa infringiese la norma que establece que la identidad de los miembros de las fuerzas Especilaes y de los francotiradores nunca deben ser desveladas.