El siglo XX fue testigo de un puñado de ideas alocadas que nunca llegaron a cuajar. Desde rifles pensados para lanzar armamento nuclear a pocos kilómetros de distancia hasta tanques que podían alzar el vuelo, cualquier idea podía ser válida en el contexto de la Guerra Fría.

Repasamos algunos ejemplos de ideas que se adelantaron a su tiempo y no prosperaron y otras que no han logrado afianzarse ya que la llegada de tecnologías más modernas las ha dejado obsoletas. 

Misil V-2

El primer misil balístico de largo alcance es el predecesor de los cohetes modernos. Pese a su capacidad destructiva, la escasa precisión de este arma puso en entredicho su efectividad: se estima que se lanzaron cerca de 3.000 misiles durante la Segunda Guerra Mundial y se estima que causó algo más de 7.000 muertos.

Bombas murciélago.

No es una idea de Batman sino del ejército de Estados Unidos. El proyecto X-Ray pretendía poner bombas incendiarias en un puñado de murciélagos para atacar las ciudades japonesas, muchas de ellas formadas por edificios de madera. Aunque las pruebas fueron muy efectivas, la entrada en servicio de la bomba nuclear cambió por completo las normas del juego.

Little David.

Este mortero tenía un diámetro de casi un metro (910 milímetros) pero nunca llegó a entrar en funcionamiento. Se construyó para probar armamento antiaéreo y llegó a viajar a Japón para ayudar en una posible invasión de la isla en 1944 pero la rendición del país frustró cualquier plan de dispararlo.

Rifles nucleares.

¿Quién podía pensar que un arma nuclear que tenía la capacidad de provocar daoñs a sus propios soldados iba a tener éxito? La idea estuvo sobre la mesa y se llegó a probar en el desierto de Nevada, pero el M-28 nunca llegó a funcionar en el campo de combate. Lanzar un arma nuclear, por pequeña que fuera, habría iniciado una escalada entre ambos frentes.

VZ-1 Pawnee.

Antes de que los 'hoverboards' estuvieran en el imaginario colectivo, el ejército de Estados Unidos hizo pruebas con un vehículo que tenía dos rotores en la bases y que se movía en el plano vertical para que los soldados pudieran disparar desde el aire. Para moverse a los lados, el soldado debía inclinarse. Al final, los militares cancelaron el proyecto debido a su lentitud.